Thursday, November 01, 2007

Los celos del cielo




Presencié lo inexplicable. Detrás de ella aparecía el cielo que no dejaba de encelarse por su belleza. El cielo se esforzó y con ayuda del viento se pintó hermoso para competir con ella que yacía inclinada, atenta y silenciosa. Tan muda e impávida. Ya no tienes campanas para sonar pero es el único campanario que se mece con el cielo y danzan al compás de los movimientos de la tierra.